De acuerdo a la información proporcionada por colectivos de búsqueda, Saúl Arias fue reportado como desaparecido desde el pasado sábado 2 de marzo cuando fue visto por última vez en el ejido Chihuahua, vistiendo un suéter rojo, pantalón de mezclilla y tenis negros.
Tan solo cinco días después, en esa misma zona, fue localizado un vehículo calcinado que resultó ser propiedad del joven, cuyo cadáver fue localizado con severas lesiones en diferentes partes de su cuerpo la tarde del lunes 25 de marzo.
Apenas este martes el director del Servicio Médico Forense (SEMEFO) detalló que la víctima contaba con señas particulares un tatuaje en el codo derecho de la letra F y presentaba un aparato de ortodoncia, lo cual podría representar una pieza clave para su identificación.
Cabe mencionar que hasta el cierre de esta edición, la identificación no ha sido confirmada por Fiscalía General del Estado ni SEMEFO, quienes determinarán con exámenes de genética si de trata del joven desaparecido.