¿Cuántos Tipos de Chicharrón Hay, y Cómo se Diferencian?

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¿En tacos, en torta o guisado? Te diremos cuántos tipos de chicharrón existen y en qué se diferencian.

El chicharrón de cerdo se pueden encontrar en mercados, supermercados y carnicerías

Fritureria “Anita" tiene más de 20 años de experiencia en elaboración de chicharrón frito. Foto: Cuartoscuro | Archivo

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Uno de los alimentos que forma parte de la cotidianidad de los mexicanos es el chicharrón, ya sea en tacos, caldos, sopas, tortas, quesadillas, este 'alimento de los dioses' tiene varias presentaciones dependiendo de en qué parte de México te encuentres. 

En esta ocasión te diremos cuántos tipos de chicharrón hay y cómo se diferencian unos de otros.

Tipos de Chicharrón y cómo se diferencian 

El cerdo llegó a nuestro continente junto con los conquistadores españoles, pero durante esos años la carne de cerdo sólo se cocinaba al vapor, al comal o asada. Fue durante la Colonia que los españoles implementaron la manteca de cerdo para cocinar y fue durante ese periodo, cuando nuestro territorio se llamaba la Nueva España, que se usó la cocción por fritura en la piel de cerdo, dando origen al ahora famoso chicharrón.

El tipo de chicharrón más conocido es el de la piel de puerco oreada y frita en manteca, que deja una textura crujiente, sin embargo, existen varios tipos de chicharrón, los cuales no todos provienen del cerdo. A continuación enlistamos todos los tipos de chicharrón.

Chicharrón prensado:

Este es un platillo que se hace con los restos de las frituras que se obtiene del fondo de las cazuelas en las que se fríe el chicharrón. Cuando se recolectan los restos, éstos se vuelven a freír y posteriormente se prensan para compactarlos y sacarle más grasa. Se come en tacos o tortas y se acompaña con una buena 'salsa cruda' mexicana o un rico guacamole. 

Chicharrón de res:

Es piel oreada y frita, se come de forma similar al de cerdo, pero es menos frecuente, también suele incorporar libro, ubre, maciza o surtidos. Es rico en tacos o como botana y se puede acompañar con una rica salsa.

Chicharrón de la 'Ramos':

Este tipo de chicharrón, popular en el norte del país, recibe dicho nombre porque se vende en las famosas 'Carnes Ramos', en el estado de Nuevo León. Procede de la papada del cerdo, es cachete frito y sazonado, tiene una textura  y sabor crujiente, jugoso y algo grasoso.  Se puede comer como si fuera una botana o puede ser un buen acompañamiento de los 'tacos de carnitas'. 

Chicharrón de pavo:

Este tipo de chicharrón proviene del pecho y parte del cuello del pavo, se dora en el horno y luego se asa o se fríe ligeramente en el comal. Se pica en pequeños trocitos para consumirlo solito o junto con la carne del pavo. Es muy crujiente y se utiliza como relleno de las 'tortas de chicharrón de pavo', las cuales son más comunes en el Centro Histórico de la Ciudad de México (CDMX). 

Chicharrón de pescado: 

Su preparación consiste en trocitos o recortes de pescado capeados en una mezcla de harina y huevo que se fríen hasta quedar muy dorados, crujientes, con color y textura similares a los del chicharrón de cerdo. Se sirve como botana o como plato fuerte en tacos con tortillas de maíz, condimentados con jugo de limón y salsa picante.

Chicharrón de queso:

La preparación de este tipo de chicharrón es poner mucho queso en un comal o planta y dejar que se dore y fría hasta que tenga una consistencia como la del chicharrón de cerdo.

Chicharrón de harina: 

Se come como botana, sobre todo en las ferias. Se vende preparado con cueritos, limón, aguacate, jitomate y salsas. Pero también se puede vender preparado sólo con salsas picantes y limón. 

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¿Es mejor cocinar con manteca de cerdo o aceite vegetal? 

Especialistas en nutrición y demás expertos señalan que, contrario a la creencia popular, la manteca de cerdo es más saludable que el aceite que proviene de las semillas. 

La grasa de cerdo es más sana que los aceites vegetales refinados porque cuenta con grasas monoinsaturadas, las cuales se vuelven más estables al momento de someterlas al calor, además hacen más difícil su oxidación.

Por otro lado, el aceite es polinsaturado y hace que al calentarse se oxide más fácilmente y presente sustancias inflamatorias y tóxicas, mismas que pueden causar cáncer y otras afecciones cardíacas.

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