Pacientes con Fibrosis Pulmonar, ‘Olvidados’ por el Covid

En 2020 las autoridades determinaron la implementación de clínicas y hospitales enfocados en pacientes con covid para hacerle frente a la pandemia. Uno de ellos se instaló en mayo de ese año en el estacionamiento del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) y durante 28 meses atendió 817 pacientes con covid, neumonía e insuficiencia respiratoria graves.

Sin embargo, durante ese periodo de tiempo los pacientes que acudían a las instalaciones por tratamientos ajenos a la pandemia, como fibrosis pulmonar, quedaron en el limbo.

Ivette Buendía Roldán, responsable del Laboratorio de Investigación en Envejecimiento y Fibrosis Pulmonar del INER, señala que las consecuencias de haber desatendido a pacientes apenas comenzarán a salir a la luz.

Yo creo que el daño que nos haya hecho el covid a los (pacientes) intersticiales apenas lo vamos a ver”, y calcula que prácticamente el retraso tanto en los tratamientos como en las investigaciones en torno a enfermedades respiratorias es de dos años

Se rompió el seguimiento de los pacientes

Buendía Roldán describe que un paciente que recibe atención en el INER es atendido cuando menos cada tres meses para monitorear si es necesario hacer algún ajuste en el tratamiento.

“Entonces, al no poder tener ese seguimiento la enfermedad ya progresó, ahorita aunque estemos dando estas terapéuticas lo que se dañó ya se dañó, y entonces vuelvo a llegar a un diagnóstico tardío, pero no porque no supiéramos de la enfermedad sino porque no tuvimos acceso al paciente, el paciente no se podía hacer las pruebas”.

La especialista asegura que durante los primeros meses de la pandemia no había filtros para realizar espirometrías, pues todos los esfuerzos estaban enfocados en atender a los posibles casos de covid.

Hubo un tiempo en el que aunque el paciente pudiera ir con un neumólogo o un internista no había manera de hacerle las pruebas

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Atención limitada y a cuentagotas

El pasado 17 de noviembre el INER dio a conocer que había desinstalado el hospital covid que estaba en su estacionamiento. Retornaban a las actividades regulares.

Ivette Buendía explica que durante la atención por la pandemia el acceso a los pacientes que recibían tratamientos previos fue limitado y difícil.

Dábamos seguimiento por teléfono, pero no los veíamos. Apenas de septiembre (de 2022) a la fecha hemos podido volverlos a recuperar

Asegura que a nivel mundial los centros dedicados a temas intersticiales estaban en alerta por la falta de seguimiento de los pacientes.

“Estamos escandalizados, por eso es que en este momento hablar de Fibrosis Pulmonar Progresiva (FPP) es muy importante porque todos los centros estábamos preocupados por nuestros pacientes (porque) los neumólogos, los internistas, los médicos generales, todos estábamos enfocados en las infecciones, en el covid”.

Al dejar de ser clínica covid y regresar del pico de la pandemia, refiere que se encontraron con pacientes con daños severos en los pulmones. “Nos está preocupando la conducta de la FPP (que avanzó) en pacientes que ya conocíamos”. Cuando un pulmón presenta algún tipo de cicatriz o daño suele ser irreversible.

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Sin embargo, señala que se necesita de al menos un año para tener estadísticas más certeras acerca del daño que causó la desatención de pacientes regulares por darle prioridad al combate al covid.

“Covid no da fibrosis, pero muy al inicio de la pandemia persistía el miedo de que se desarrollara fibrosis, pero no va por ahí. El paciente puede desarrollar fibrosis porque ya tenía algún padecimiento previo y el covid lo aceleró”.