¿Por qué no Puede Salir de Austria el Penacho de Moctezuma?

El Penacho de Moctezuma es una pieza representativa de México que ahora se encuentra exhibida en Austria, conoce por qué no puede volver.

|

N+

-
El penacho de Moctezuma se exhibe en el Museo de Etnología en Viena. Fuente: AFP

El penacho de Moctezuma se exhibe en el Museo de Etnología en Viena. Fuente: AFP

COMPARTE:

El Penacho de Moctezuma es una obra histórica que está exhibida en el Museo de Etnología de Viena en la ciudad de Austria; la cual por razones de alto nivel no puede salir de ahí o siquiera trasladarse a otro museo, ya que, de acuerdo con diferentes estudios realizados por expertos mexicanos y austriacos, es una pieza sumamente delicada que podría desplomarse en segundos.

Este Penacho se realizó con plumas de diferentes aves, siendo las plumas verdes del quetzal las más representativas y vistosas de la pieza, además de que también está conformado por engarces de oro. Su tamaño va desde los 130 hasta los 178 centímetros y cuenta con restauraciones desde el año 1878.

Origen del Penacho de Moctezuma

Debido a las plumas y la apariencia de esta pieza, algunas personas consideran que perteneció al antiguo emperador azteca, Moctezuma, sin embargo, estudios realizados por México y Austria han demostrado que no hay ninguna referencia histórica o arqueológica que lo compruebe.

La primer referencia conocida del Penacho proviene de 1596, dentro del inventario de la colección del archiduque Fernando II del Tirol, quien lo tenía resguardado en su Castillo de Ambas, en Innsbruk, al oeste de Viena.

Restauración del Penacho de Moctezuma en el Museo de Etnología de Viena. Fuente: Cuartoscuro

¿Por qué no puede salir de Austria?

Entre los años 2010 y 2012, los expertos mexicanos y austríacos realizaron una serie de restauraciones en el Penacho, dónde por parte de México, investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) llevaron a cabo una investigación especializada en la pieza.

Tiempo después estos investigadores en conjunto con los investigadores austriacos, determinaron que era imposible el traslado fuera del museo, esto debido a que el material orgánico, de origen animal, ha sufrido un fuerte deterioro el cual podría destruirse con cualquier vibración de alto impacto. Esto descartó la posibilidad de que pudiera salir del lugar en el que se encuentra actualmente.