Ignacio López Tarso, Una Vida Llena de Aplausos en Teatro
En 2021, López Tarso celebró 70 años de carrera con la obra 'Una vida en el teatro', de David Mamet, al lado de su hijo, Juan Ignacio Aranda
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Gobierno de CDMX rinde homenaje al actor Ignacio López Tarso, agosto de 2019. Foto: Secretaría de Cultura CDMX
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Ignacio López Tarso estudió teatro en el Instituto Nacional de Bellas Artes, bajo la supervisión de André Moreau y Xavier Villaurrutia, entre otras grandes personalidades.
El joven actor se abrió paso en el escenario. El sueño de una noche de verano era el marco para su debut en teatro.
El director, André Moreau, observaba el desempeño del estudiante en el foro del Palacio de Bellas Artes.
Para ese año, Ignacio López Tarso ya se había preparado con Xavier Rojas y estudiaba actuación en la Academia de Arte Dramático del Instituto Nacional de Bellas Artes, con los consejos y guía de Xavier Villaurrutia.
La obra tuvo tal aceptación que repitió para 1949.
López Tarso daba así su primer paso firme en la actuación.
Con la dirección de Xavier Villaurrutia, en 1949, participó en Crimen y castigo, de Fedor Dostoievski.
Ya en la década de los años 50, López Tarso debuta como profesional. La obra se llamó Nacida ayer, cuyo autor era el escritor y director estadounidense Garçon Kanin.
La lista rápidamente creció con nuevas obras como Que tú me quieras y Ahí viene Gorgonio Esparza, en ambas dirigido por Xavier Rojas.
Después vendría La calle del ángel, del autor Patrick Hamilton, con la dirección de Xavier Villaurrutia.
Ignacio López Tarso se integró por ese tiempo a la compañía de Teatro Clásico de México, donde intervino en Ariel y Calibán, dirigido por Julio Taboada.
La celestina, de Fernando de Rojas, estrenada en 1953, bajo la dirección de Álvaro Custodio, trajo a López Tarso su primer premio, Mejor Actor Novel.
Después vino Las mocedades del Cid, del autor Guillén de Castro, por lo que el teatro fue la base sólida para el actor, nacido en la Ciudad de México en 1925.
En los años cincuenta participa en más obras de corte clásico como Don Juan Tenorio, de José Zorrilla o La discreta enamorada de Lope de Vega, pero incursiona con obras nuevas como Moctezuma Segundo, de Sergio Magaña, cuyo estreno fue en 1954.
La trayectoria de Ignacio López Tarso en los escenarios teatrales se multiplicó.
Vino en 1960 Otelo, de William Shakespeare, con la dirección de Ignacio Retes.
En 1962, con Cyrano de Bergerac, y dirigido por Ignacio Retes, Ignacio López Tarso ganó el premio al mejor actor otorgado por la Asociación de Críticos de Teatro de México.
Asimismo participó en Edipo rey, de Sófocles, nuevamente bajo la dirección de Ignacio Retes en 1962.
El famoso maestro de actuación Seki Sano lo consideró para la obra Un hombre contra el tiempo, de Robert Bolt, estrenada en el teatro Hidalgo en 1963.
En 1968 es llamado para actuar en El rey se muere de Eugéne Ionesco, montada en el teatro Hidalgo, bajo la dirección de Alejandro Jodorowsky.
En los años 70, participó en Equus, de Peter Shaffer, dirigido por Enrique Gómez Vadillo, al lado de Jaime Garza.
En 1977 se estrena El avaro, de Moliére, en el teatro Hidalgo, con la dirección de Miguel Sabido, que fue un sonado éxito de escena.
En 1983, López Tarso es protagonista de El Vestidor, escrita por Ronald Harwood, y que montó en escena José Luis Ibáñez, junto a él actuó Héctor Bonilla.
En 1989 actuó en El desperfecto, de Friedrich Dürrenmatt, y dirigido por Raúl Araiza y que se estrenó en el teatro Insurgentes.
Vinieron después, Edipo en Colono, de Sófocles, en el año 2000 y Doce hombres en pugna, de Reginald Rose, montada en el año 2009.
En 2015 Ignacio López Tarso encabezó Aeroplanos, del argentino Carlos Gorostiza, y con la dirección de Salvador Garcini. Lo acompañó en el escenario Manuel El loco Valdés.
En años recientes participó en Un Picasso, al lado de Araceli Arámbula, temporada 2016 a 2017, y en 2018 en la obra El padre, junto a Erika Buenfil, dirección en ambos casos de Salvador Garcini.
En 2021 celebró 70 años de carrera con la obra Una vida en el teatro, de David Mamet, al lado de su hijo Juan Ignacio Aranda.
López Tarso interpretó a Roberto, actor consagrado, mientras que su hijo Juan Ignacio Aranda, personifica a Juan, un actor que apenas comienza.
En entrevista compartió:
Me hace muy feliz, yo en el escenario soy todo lo que he querido ser, en el escenario la paso muy bien, en el escenario me siento muy seguro, muy tranquilo, muy a gusto, muy feliz
Huella indeleble en el trabajo teatral de Ignacio López Tarso la dejaron personajes como Xavier Villaurrutia, Xavier Rojas, Salvador Novo, Clementina Otero, Celestino Gorostiza, André Moreau, Seki Sano, Fernando Wagner y Fernando Torre Lapham.
Los aplausos para Ignacio López Tarso resuenan con fuerza.
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Con información de Roberto Santa Cruz.
LLH