Embajadas y Consulados de México Operan con Flotilla de Autos Obsoleta
Uno de cada tres vehículos destinados al uso de embajadas y consulados de México en el extranjero representa un riesgo al tener antigüedades mayores a 10 años o malas condiciones mecánicas
Andrés M. Estrada
Una tercera parte de la flotilla de autos de la SRE tiene una antigüedad de entre 10 y 25 años. Foto: SRE
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La seguridad de los funcionarios de embajadas, consulados, misiones y oficinas de enlace de México en el exterior, así como empresarios, turistas y otros mexicanos, que usan sus vehículos oficiales en el extranjero está en riesgo.
Al menos una tercera parte de las unidades con la que cuenta la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) es obsoleta, por las malas condiciones mecánicas o al tener una antigüedad de entre 10 y 25 años, revelan documentos de la dependencia, en poder de N+.
La flotilla vehicular de las representaciones de México en el exterior está integrada por un total de 281 vehículos, con antigüedades variadas. 78 unidades rebasan los 10 años de uso, mientras otras 28 casi se le acercan al tener 9 años, de acuerdo con los datos de la SRE.
A esto se suma que existen otras unidades que podrían considerarse que dejaron de tener una vida útil si se toma en cuenta la “Guía de vida útil estimada y porcentajes de depreciación”, publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 15 de agosto de 2012, por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). En ésta se señala que los automóviles y equipo terrestre tienen una vida útil de 5 años, con un porcentaje de depreciación del 20% anual.
Al respecto, la misma dependencia a cargo de la canciller Alicia Bárcena, puntualiza en sus oficios que: “Se observa que en la flotilla vehicular propia de las RME’s hay un total de 185 vehículos con más de 5 años de uso, equivalentes al 65.8% del total de la flotilla vehicular, de los cuales 8 se encuentran en muy mal estado”.
En este sentido la misma cancillería acepta que tienen automóviles sujetos de constantes reparaciones y mantenimientos, que en ocasiones quedan varados en los talleres por falta de refacciones o por la propia reparación.
Un ejemplo es que entre enero de 2019 a diciembre de 2022, gastaron 1.2 millones de pesos en el mantenimiento y reparación de 8 vehículos, “mismos que irán incrementándose año con año”.
Por otra parte, en el actual gobierno se han adquirido en menor medida vehículos respecto a la administración pasada. Por ejemplo, con el presidente Andrés Manuel López Obrador se renovaron 89 autos, mientras que con Enrique Peña Nieto fueron 117.
Riesgos de uso de autos y restricciones de circulación por medio ambiente
Los documentos de la SRE también exponen de manera puntual que al contar con una flotilla vehicular obsoleta, se pone en riesgo el cumplimiento de las responsabilidades y prestación de los servicios de las RME’s, así como la seguridad de los mexicanos que las usan.
“Representando un riesgo para la seguridad de sus ocupantes, que son funcionarios mexicanos del SEM en el cumplimiento de su deber, mexicanos radicados en el exterior, mexicanos turistas, que se les presente alguna problemática particular que amerita el uso de los vehículos para su atención, empresarios mexicanos que visitan los países por motivos de negocios e inversiones y, funcionarios mexicanos de todos los niveles de gobierno que visitan los países en comisión oficial “, puntualiza.
En tanto que la contratación de pólizas de seguros de cobertura limitada trae como consecuencia “que en caso de algún accidente, se corra el riesgo de enfrentar problemas legales y económicos importantes”.
Sin embargo, no es lo único. Detallan algunas otras de las problemáticas.
Por ejemplo, en el caso de la Unión Europea, destaca el control del impacto ambiental y las normas de emisiones de contaminantes, que cada vez han sido más restrictivas, como la Euro 6, que reduce las emisiones de partículas en un 80%.
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Pero la preocupación es que para el 2025 entré en vigor la norma Euro 7 y se disminuyan más los límites de emisiones contaminantes en todos los países miembros de la Unión Europea.
Es decir que si las representaciones mexicanas no cuentan con vehículos que las cumplan, no podrán circular, afectando labores como encuentros protocolarios y de trabajo con los gobiernos estatales y del ámbito político, económico, académico, científico, cultural y de la sociedad civil; lo mismo que realizar visitas de protección consular a cárceles y centros migratorios o de víctimas.
Al igual subraya el impacto que puede haber en Medio Oriente.
En el caso de la embajada en Israel, se encuentra en una zona con un conflicto social y armado entre israelíes y palestinos y “al tener vehículos en pésimas condiciones mecánicas o técnicas, impide movilización inmediata de funcionarios o ciudadanos mexicanos que pudieran quedar atrapados en medio de posibles enfrentamientos armados”.
Así mismo destaca las complicaciones que puede haber en Centroamérica y el Caribe, donde se realizan traslados a diversos municipios o puertos fronterizos alejados de las sedes de las representaciones diplomáticas, para dar apoyo consular; atender a connacionales privados de su libertad; llevar a cabo trámites administrativos y de servicios, entre otros, y se tiene que circular, en algunos casos, por carreteras rurales, cañadas y en general por zonas con escasa infraestructura y difícil acceso.
En este caso, asegura, no se puede llevar a cabo con vehículos que hayan concluido su vida útil o que corran el riesgo de quedar varados por fallas mecánicas, por el riesgo que eso representa, tanto para los ocupantes como para los connacionales que queden impedidos de recibir servicios consulares o de protección.
Aunque el documento no muestra la totalidad de la ubicación de los vehículos con mayor antigüedad, uno de los inventarios expone que 5 de ellos son del año 2007 en distintas embajadas: la de Bélgica cuenta con 2 Mercedes Benz Viano Trend, tipo Van; la de Bolivia, una Ford Explorer EX 4x4; la de España, un Renault Grand Espace, tipo Suv y la de Dinamarca, un Mercedes Benz E280 tipo Sedan.
En este último país también tienen una Toyota Avensis, tipo Sedan de 2005, del mismo año la embajada en la Santa Sede cuenta con un Mercedes Benz E200 Kompressor, tipo sedan.
Otros que rebasan los 10 años de antigüedad están en la de Alemania, con un Skoda Octavia Combi 2010 y en España, con un Volkswagen Jetta 2012.
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