¿Quién se Queda Con Perros o Mascotas Tras un Divorcio?
Como dice la canción: "si tú te vas y yo me voy, ¿con quién se queda el perro?"
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El ministro Zaldívar explicó qué se debe de hacer con la mascota en caso de divorcio. Foto: Unsplash | Ilustrativa
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Sabemos que para no pocas personas un perro o un gato no es una simple mascota, son compañía y un miembro más de la familia.
Es por ello que, cuando una pareja comienza el proceso de divorcio, puede ser igualmente difícil decidir quién se quedará con la mascota.
Arturo Zaldívar, el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), se dio a la tarea de responder a esta cuestión.
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¿Quién se queda con el perro en caso de divorcio?
Sabemos que el ministro Zaldívar usa con regularidad su cuenta de TikTok para responder a cuestiones comunes, de forma simple y clara para mantener una cercanía entre el Poder Judicial y la población.
Esta vez, el exministro presidente de la SCJN usó esta popular red social para explicar que, pese a que se tienen pocos precedentes al respecto en este tema, “son asuntos delicados que se tienen que tratar con mucho cuidado”.
El ministro continúa diciendo que la decisión debe de ir en pos de buscar lo mejor, tanto para la pareja como para el perro.
Es decir, lo ideal es que sea un acuerdo entre la pareja, ponderando lo mejor para la mascota, tomando en cuenta a quién busca más el perro, quién tiene más tiempo para dedicarle, dónde tendrá más espacio y mejores condiciones para vivir feliz, etc. Sin embargo, muchas veces durante el divorcio las parejas no se encuentran con la mejor disposición de negociar, y es entonces cuando el juez puede determinar este asunto.
Arturo Zaldivar dice:
Si la pareja no se pone de acuerdo, entonces será un juez quien decida, tomando en cuenta todas las circunstancias del caso.
Sin embargo, en todo momento se debe de considerar a un perro como lo que es: un ser vivo y no un objeto, con el que se tienen sentimientos profundos.
En otras palabras, cuando se emprenda el proceso de divorcio se deberá estipular quién se quedará con la custodia del perro o el gato. Además de respetar la decisión de la custodia del animal en cuestión, se tendrá que hacer lo propio con las visitas que se establezcan de común acuerdo.