CJNG, de los Explosivos a la Operación Psicológica
Es uno de los cárteles de la droga que ha hecho del uso de explosivos un modus operandi para defender su territorio y enfrentar a rivales y al Estado
Iván Cabrera | N+
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Este martes, un artefacto explosivo detonó cuando una camioneta de la Fiscalía de Jalisco avanzaba por un camino en Tlajomulco de Zúñiga, con un saldo mortal de tres policías fallecidos y 10 heridos.
"Se trata de un hecho sin precedentes que pone de manifiesto de lo que son capaces estos grupos de la delincuencia organizada. Este ataque representa también un desafío contra el Estado mexicano en su conjunto", escribió el gobernador Enrique Alfaro.
De acuerdo con informes de agencias y especialistas de seguridad en Estados Unidos, esta estrategia por parte de cárteles del narcotráfico, en especial del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), tiene dos objetivos claros: proteger su territorio y disuadir psicológicamente a rivales y actores del Estado.
Según estos informes en EUA, el CJNG es uno de los más poderosos y ha innovado en estrategias operativas, como en el uso de drones para lanzar explosivos, y la implementación de campos minados. Se trata, pues, de una organización que además de estar bien armado, tiene poder explosivo.
CJNG, el más poderoso y mejor armado de México
En 2018, la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, en inglés) señaló que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) era uno de los más poderosos cárteles de la droga en México; mientras que a nivel transnacional, el Departamento de Justicia lo ponía entre los cinco más peligrosos.
¿En qué radica su poder? De acuerdo con la ATF, es capaz de traficar muchas toneladas de cocaína, metanfetamina y fentanilo a los Estados Unidos, así como por su violencia y la pérdida de vidas dentro de México.
Dice la ATF sobre este grupo fundado en 2011, cuya presencia y negocios ilícitos alcanzan no sólo a EUA y México, sino a Europa, Asia y Australia:
El CJNG es un poderoso cártel de las drogas en México como resultado de la disciplina, mando y control de la organización, las sofisticadas técnicas de lavado de dinero, las eficientes rutas para transportar droga y su extrema violencia
En el documento Mexico: Organized Crime and Drug Trafficking Organizations, del Congressional Research Service, ente encargado de proporcionar investigación y análisis, se detalla que el CJNG fue declarado por el Departamento del Tesoro, en 2015, como la "más prolífica y violenta organización de tráfico de drogas".
En 2020, señala el informe, tenía presencia en 27 de los 32 estados mexicanos, con bastión en Jalisco, territorios ganados gracias a su reputación de ser un cartel de extrema e intimidatoria violencia. Incluso, la DEA lo considera el cártel mejor armado de México.
El uso de minas antivehículos
Un análisis hecho por C/O Futures, firmado por el doctor Robert J. Bunker y el especialista en seguridad John Sullivan, sobre el uso de minas improvisadas o artesanales antivehículos por parte del CJNG tiene como objetivo una orientación defensiva que pueden ser intercaladas con dispositivos explosivos improvisados.
La idea es crear una posición defensiva de distintas capaz que además se unen a posiciones de tiros fortificadas y trincheras antivehículos. "Las minas improvisadas antivehículos han aparecido en regiones del país desde 2021 y se usan para contrarrestar a cárteles, bandas de narcotraficantes rivales".
El objetivo es combatir a grupos antagónicos, algunos de ellos han construido vehículos blindados de combate, conocidos como 'monstruos'; pero también a autos blindados de la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina-Armada de México.
Este estudio detalla que desde hace tres décadas, los cárteles del narcotráfico han usado los dispositivos explosivos improvisados, pero tuvo un repunte en 2016, con la disputa entre el CJNG y el Cártel de Santa Rosa de Lima, y aunque este último se ha fragmentado, el de Jalisco sigue peleando con otras organizaciones y mantiene el uso de minas antivehículo y drones armados.
Robert. J. Bunker y John Sullivan afirman que además de estos dispositivos usados, el CJNG estaría innovando con la reciente aparición de campos minados, aunque existe poca información relacionada con ellos.
El uso de explosivos como medida psicológica
Este mismo informe explica que en el pasado, los artefactos explosivos improvisados se han utilizado con fines de violencia instrumental, así como para crear operaciones psicológicas contra un rival, por lo que se considera más como una acción terrorista que insurgente o militar.
En este sentido, se puede decir que los ataque hechos por el CJNG tiene esa doble vertiente: por un lado, es instrumental porque cumple la función de mantener a salvo un terreno; y por otro, psicológico, pues su plan es impactar a la mayor cantidad de personas.
En el libro, Psychological Operations, de Frank. L. Goldstein, y Benjamin F. Findley, Jr., se expresa que las operaciones psicológicas tienen la finalidad de, por una parte, reducir la moral y la eficiencia de combate "de las tropas enemigas y crea disidencia y desafección dentro de sus filas".
El ejemplar deja claro que lo que mueve a los cárteles de la droga es el beneficio, el lucro, y no una ideología, por lo que "no se pelea contra un enemigo convencional, y no debe ser considerado como un conflicto ideológico".
¿De dónde vendría el uso de explosivos?
En 2011, un documento del Subcomité sobre Terrorismo, No Proliferación y Comercio de la Cámara de Representantes, habló del vínculo entre Hezbolá y los cárteles de la droga mexicanos, un peligro para los Estados Unidos.
Mientras tanto, los lazos entre Hezbolá y los cárteles de la droga mexicanos obviamente se han fortalecido. Y esto tiene sentido, los cárteles de la droga obtienen el contrabando y experiencia explosiva de Hezbolá; y Hezbolá consigue presencia en la frontera mexicana sin ley
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