Veto a Celulares en Escuelas Mejoró Concentración y Aprendizaje de Alumnos

Hace un año, las escuelas de Río de Janeiro vetaron el uso de celulares en sus instalaciones, lo que ha llevado a los alumnos a jugar en el recreo como "en los viejos tiempos" y una mayor concentración durante las clases.

Ahora, la medida se hizo extensiva en todo el país, a partir de una ley firmada en enero por el presidente Lula, por lo que estudiantes de todo Brasil tienen prohibido usar dispositivos en salones y en el recreo.

• Según la UNESCO, a finales de 2024, el 40 % de los sistemas educativos en el mundo tenía algún tipo de restricción al uso de celulares.

Aunque fue difícil para los jóvenes desprenderse de sus celulares, ahora ya ni siquiera los llevan. Solo algunos deciden cargar con ellos, pero tienen que dejarlos en cajas de plástico antes de entrar a clases.

Los alumnos afirman que el veto molestó en un principio, pero ahora ven los beneficios, en especial la parte de la vida social y estar más atentos a lo que ocurre alrededor o si sus compañeros tienen algún problema.

COVID-19 desató una epidemia de adicción a los celulares

Renan Ferreirinha, secretario municipal de Educación de Río, dice que tras la pandemia de COVID-19, los profesores notaron que los menores regresaron más agitados, impacientes, ansiosos y adictos a los celulares.

Según un estudio de la alcaldía de Río de Janeiro, la prohibición de los dispositivos trajo los siguientes beneficios para los estudiantes:

• Mejoró la concentración.
• Aumentó la participación en clase.
• Mayor rendimiento de los estudiantes.

Ferreirinha, quien también es diputado federal, participó en la creación de la ley que extendió el veto en el país. Afirma que si dejar o moderar el uso de estos aparatos es difícil para los adultos, lo es más para los chicos.

No tiene ningún sentido que un profesor trate de dar clase mientras el niño está viendo un video en las redes sociales o jugando en su teléfono

Islas de jóvenes pegados al celular

En la escuela Reverendo Martin Luther King, en Río, la subdirectora Fernanda Heitor, explica que hubo resistencia a dejar los celulares. Antes de la prohibición, los jóvenes se sentaban en islas y se quedaban pegados a sus teléfonos.

No interactuaban, no jugaban mucho, no hablaban. Ahora juegan (...) Esto ha transformado la escuela. Se ha vuelto mucho más alegre, animada

La nueva ley brasileña permite el uso de celulares con fines educativos, de emergencia y salud. Sin embargo, algunos expertos señalan que lo importante es enseñar a los chicos a usar la tecnología de forma responsable.

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Con información de AFP

ICM