Colombia Tiene el Doble de Hipopótamos de Escobar Estimados
Un nuevo censo reveló que el número de hipopótamos de Escobar sería el doble de lo estimado anteriormente y Colombia aún no sabe resolver la crisis ecológica
Elisa de Gortari | N+
Colombia tendría el doble de hipopótamos de lo estimado. Foto: AFP | Archivo
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Desde hace varios años Colombia lidia con una insólita invasión de hipopótamos. Por supuesto, estos no llegaron por voluntad propia, sino que son descendientes de aquellos que trajo desde África el narcotraficante Pablo Escobar para el zoológico personal mantuvo en su residencia.
Tras la muerte del capo en 1993, estos hipopótamos escaparon de su rancho, medraron en terrenos aledaños y comenzaron a reproducirse. Sin competidores de ninguna clase, han prosperado a sus anchas por treinta años.
Según un censo realizado por el Instituto Alexander Von Humboldt de la Universidad Nacional de Colombia, en el país habría cerca de 200 hipopótamos. El estimado oficial se ubica entre 181 y 215 ejemplares.
El problema es que una estimación anterior, del año 2021, afirmó que en terreno colombiano había no más de 98 hipopótamos. Estos animales se han establecido en la cuenca del río Magdalena, principal río navegable del país.
El informe señala que los hipopótamos están reproduciéndose con rapidez, lo que está poniendo en serio riesgo a otras especies y podría provocar una catástrofe ambiental en uno de los doce países con mayor diversidad natural del mundo. Según el estudio, de momento las dos especies más vulnerables a la invasión de este mamífero son el manatí y el chigüiro, como se llama en Colombia al capibara.
Los hipopótamos son, además, una severa amenaza para los seres humanos. Contrario a la creencia popular, se trata de uno de los animales más agresivos que hay.
En el país ya se han registrado encuentros letales entre humanos e hipopótamos. Por si fuera poco, estos también han protagonizado aparatosos accidentes de tránsito.
Capturar y reubicar a los hipopótamos es costoso, mientras que matarlos es una medida reprobada por la opinión pública colombiana. En 2009, soldados fueron criticados duramente tras posar con el cadáver de uno de estos animales.
La escena cobró notoriedad a nivel mundial e incluso inspiró la novela El ruido de las cosas al caer, del colombiano Juan Gabriel Vásquez, que ganó el Premio Alfaguara en 2011. La simpatía que despiertan los hipopótamos entre no pocos colombianos ha impedido que el gobierno emplee medidas radicales e impopulares.
El informe del Instituto Alexander Von Humboldt concluye que se debe reforzar una estrategia múltiple, que incluya la captura, la esterilización y contracepción, así como el confinamiento y reubicación del máximo número de ejemplares posibles. México está entre los países donde se piensa enviar a especímenes, en este caso a un santuario en Sinaloa.
El texto también propone reforzar las acciones de concientización en las zonas afectadas sobre los peligros de esta especie, que está lejos de ser inofensiva, como le considera buena parte de la opinión pública.
Si no se toman las acciones adecuadas, según estima el informe, para el año 2035 la población de hipopótamos en Colombia podría llegar a los mil ejemplares.
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