Los manifestantes usaron extintores contra los uniformados, quienes además de detener a algunos de ellos, comenzaron a quitar carpas y casas de campaña
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Policía realiza la detención de manifestantes en el campamento en la UCLA. Foto: Reuters
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Después de que el martes se registrara un ataque al campamento pacífico propalestino por opositores a la causa, y de un ultimátum para que los manifestantes de la Universidad de California (UCLA) se retiraran; la madrugada de este jueves la Policía de Los Ángeles ingresó a la zona donde están los manifestantes para desalojarlos.
Tras esta primera incursión que duró unos minutos y donde los oficilaes fueron recibidos por manifestantes con sombrillas y flashes para aturdirlos y evitar su ingreso al campamento, la policía se replegó nuevamente.
Alrededor de las cuatro de la madrugada de este jueves, la policía ingresó de nuevo al campamento, y derribó las barricadas que habían colocado, los estudiantes, mismos que usaron extintores contra los uniformados.
La policía comenzó a detener a algunos manifestantes. Dentro del campamento, algunos protestantes rociaron a la policía con extintores mientras coreaban: "No tenemos miedo".
Horas antes, la noche del miércoles, habían llegado más elementos de seguridad privada al campus y seguridad montada en bicicletas eléctricas, que se alistaban para ingresar y desalojar al campamento donde se encontraban más de 50 casas de campañas.
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En el transcurso de la noche de este miércoles, se había visto que los manifestantes ingresaban martillos y taladros, presuntamente para reforzar las barricadas donde estaban.
Afuera, había personal del Sheriff de Los Ángeles; en tanto, los estudiantes salían y entraban al campamento con bolsas sin que fueran revisadas para saber el contenido de ellas.
Varios otros estudiantes optaron por retirarse para evitar estar en medio de la tensa situación que pudiera generarse en la UCLA, en medio de la zozobra por un operativo policial que finalmente ocurrió.
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Con información de Humberto Barrera, AP y N+
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