Condóminos quitan Rampa a Abuelita en Silla de Ruedas
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Esta asociación de condóminos obligó a esta pareja de adultos mayores a quitar la rampa para silla de ruedas, aunque no pueden salir de casa sin ella
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Condóminos quitan Rampa a Adulta Mayor en Silla de Ruedas. Foto: Pexels | Ilustrativa
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Una pareja de adultos mayores afirma estar “atrapada en su propia casa” desde que la asociación de condóminos local los obligó a quitar la rampa que usaban para la silla de ruedas. Este caso ha causado indignación entre los residentes.
Nancy Hurst y su marido Lyle viven en la ciudad de Mt. Juliet, al este de Nashville, Tennessee. Su casa se encuentra en un vecindario llamado Cedar Creek Commons, que está a cargo de una asociación de condóminos.
Las HAO (siglas que en inglés significan “asociación de propietarios”) son una figura jurídica que suele administrar vecindarios enteros, donde se hacer cargo de la reglas comunes de ordenanza y limpieza.
Sin embargo, en ocasiones, las HAO ejercen un poder desmedido sobre las vidas de los residentes, como lo denuncia esta pareja. Nancy padece artritis reumatoide y depende de su silla de ruedas motorizada y de su marido para sobrevivir.
Aunque ella afirma que Lyle le presta una ayuda impagable, él mismo padece con dificultades motrices asociadas a la edad. El triste periplo que ha atravesado la pareja comenzó cuando Lyle, quien es veterano de la guerra de Vietnam, tuvo una fuerta caída afuera de su casa.
Como Nancy no podía ayudarle a levantarse, tuvieron que llamar a la policía. Cuando el agente ayudó a Lyle a ponerse de pie, notó que la rampa para silla de ruedas afuera de su casa estaba en mal estado.
A la semana siguiente, una asociación sin fines de lucro afiliada a la policía local se acercó a los Hurst para reemplazar la rampa. La asociación financió y construyó una nueva rampa, con barandales.
Sin embargo, lejos de ser una bendición, en ese momento empezaron los problemas. A los pocos días, la HAO que administra Cedar Creek Commons mandó un escrito a la pareja donde les exigía que quitaran de inmediato la nueva rampa.
Según la asociación de condóminos, la rampa de los Hurst “se había construida sin permiso”, “bloqueaba la banqueta” y “quitaba espacio” a un cajón de estacionamiento. Nancy Hurst asegura que la anterior rampa se construyó sin solicitar ninguna autorización previa hace ocho años y nunca suscitó un problema con la junta de condóminos.
Dos meses más tarde, la HAO envió una segunda carta donde amenazó con tomar acciones legales contra los Hurst si no quitaban la rampa para silla de ruedas. Tras acceder a la petición de la junta de condóminos, la pareja afirmó a la cadena local WKRN de Nashville que se siente secuestrada en su propia casa.
Sin la rampa, no pueden acceder a su coche y llevar a cabo sus actividades diarias. Hasta ahora, han dependido de los vecinos, quienes se han comprometido a hacer por ellos las compras y traer sus medicamentos.
Sin embargo, la pareja no considera que esta situación pueda sostenerse mucho tiempo. Lyle declaró a la cadena WKRN:
Estoy muy enojado porque también tengo cierto grado de discapacidad y nos es muy difícil salir así a hacer las compras. En su estado actual, está dispuesto para el desastre; la próxima vez que salga [sin la rampa] puede ser la última
Aunque el caso ha despertado la indignación de los residentes, la asociación de condóminos se ha negado a revertir las amenazas contra los Hurst y dialogar con ellos.