El gobierno de China rechazó las "difamaciones" del Departamento de Energía de Estados Unidos, que junto con al FBI, concluyó que la COVID-19 se originó por una fuga en un laboratorio chino e insistió en oponerse a "cualquier tipo de manipulación política" respecto al origen de la enfermedad.
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El portavoz de Exteriores, Mao Ning, dijo durante una rueda de prensa:
El rastreo de los orígenes de la COVID es una cuestión científica y no se debe politizar. Las partes implicadas deben dejar de inflar la teoría de las fugas de laboratorio y de difamar a China
De acuerdo el diario The Wall Street Journal, que cita el informe emitido por el departamento y el organismo federal, consideran esta teoría como significativa porque la agencia supervisa una red de 17 laboratorios nacionales estadounidenses, algunos de ellos llevan a cabo investigaciones biológicas avanzadas.
China también ha arremetido repetidamente contra Washington debido a los informes publicados por sus servicios de inteligencia sobre la enfermedad remiten a la investigación de la Organización Mundial de la Salud en marzo de 2021.
En el informe de la OMS realizado en Wuhan, en el cual se dejan cuatro hipótesis sobre el origen de la pandemia, pero sin poder llegar a una conclusión definitiva.
Con información de EFE.
MV
