Hallan Plomo en 18% de los Productos de la Canasta Básica Mexicana

Un estudio de investigadores mexicanos publicado recientemente, encontró que el 18% de los alimentos de la canasta básica mexicana contienen plomo

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Arantza Ocampo

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Un estudio reveló que el 18% de los productos que forman parte de la canasta básica mexicana, contienen plomo, el cual es tóxico para la salud

Un estudio reveló que el 18% de los productos que forman parte de la canasta básica mexicana, contienen plomo, el cual es tóxico para la salud

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La intoxicación por plomo es un problema de salud pública que afecta a casi un millón y medio de infancias de entre uno y cuatro años en México.

“El niño puede manifestar esta pérdida de neurona la puede manifestar como un bajo desempeño escolar durante sus años de primaria o secundaria”, explica Luis Camilo Ríos Castañeda, doctor en Ciencias e investigador del Instituto Nacional de Rehabilitación.

La principal causa de la exposición a este metal es el uso de la loza de barro vidriada para cocinar, pero no es la única.

El plomo está presente en el 18% de los alimentos de la canasta básica en el país, según un estudio presentado por investigadores mexicanos la semana pasada.

Según advierten, esto podría agudizar el problema de salud que genera este tóxico.

“Claro que es un problema de salud pública que merece atención, o sea es antiguo, y además afecta más a las poblaciones más vulnerables”, señala una de las autoras del estudio, Martha María Téllez-Rojo, del Centro de investigación y salud del Instituto Nacional de Salud Pública.

De acuerdo con el estudio, el plomo está presente en algunos de los productos más consumidos por la población mexicana, como arroz, trigo, soya, pimienta, chile guajillo, embutidos y alimentos para bebé.

Estos se contaminan a través de la tierra y el agua con la que son tratados, ya que ambos recursos están expuestos a desechos industriales, explican especialistas.

Según señala Téllez-Rojo, hay varias fuentes de contaminación: “Puede venir desde el suelo, desde el agua, desde el pesticida, desde el proceso industrial, la preparación, el almacenamiento, en todos esos momentos se puede contaminar un alimento”.

Algunas personas suelen consumir estos alimentos diariamente. Y aunque se dijeron dispuestas a dejar de hacerlo para evitar la intoxicación, sustituirlos no es fácil.

Un sondeo realizado a compradores frecuentes de estos productos lo demostró así:

“Como tengo familia ellos me exigen todos los días que el sandwich, que las quesadillas, que las sincronizadas, tendría que ver con qué suplirlo, más que nada”, señala Sofía, quien diario compra estos alimentos.

“De hecho lo sabemos, y tratamos de comprar lo mejor posible, pero es una necesidad, que para el sandwich, que para esto… ”, dicen Andrea y Salvador, quienes destinan la preparación de estos alimentos principalmente a sus hijos.

Una vez que el plomo ingresa al organismo, provoca daños que se perciben a largo plazo.

Algunas de sus consecuencias son: falta de memoria, enfermedades del corazón y de riñones; también reduce la capacidad de aprendizaje y autocontrol.

“Es un problema silencioso, y es un problema crónico porque se está exponiendo la gente a concentraciones relativamente bajas de plomo, pero todo el tiempo”, advierte el doctor Ríos, quien también colaboró en el estudio y lleva más de 30 años investigando las fuentes de contaminación de plomo en el país.

Para prevenir sus efectos, las y los expertos proponen crear un Programa Nacional de Monitoreo, para analizar periódicamente su presencia en la sangre, así como identificar las fuentes de contaminación.

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