La Selección de los Estados Unidos se proclamó campeona de la primera edición de la Copa de Oro Femenina de la Concacaf tras imponerse por un solitario 1-0 a Brasil en la final disputada en San Diego, California.
Después de la decepción sufrida en el pasado Mundial de Australia y Nueva Zelanda, donde cayó en los octavos de final ante Suecia, el combinado estadounidense volvió a la senda de los éxitos batiendo a un rival que tampoco atraviesa su mejor momento, pese a que dominó por muchos momentos el encuentro.
Un cabezazo de la experimentada centrocampista Lindsey Horan en el tiempo añadido del primer tiempo sirvió para dar el triunfo a la selección.
De esta manera, y sin un futbol espectacular, EUA levantó el título en una competición donde, de todos modos, demostró que parece haber perdido algo de su potencial al caer en la fase de grupos con México.
En los cruces del campeonato arrolló a Colombia (3-0) y luego necesitó los penaltis para dejar fuera en las semifinales a Canadá (2-2).
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Con información de Europa Press
ICM