Descubren Extraña Nebulosa con Forma de Fuegos Artificiales
La nebulosa Pa30 tiene forma de fuegos artificiales y es la huella de una supernova ocurrida hace 850 años
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Científicos han descubierto una extraña nebulosa con forma de fuegos artificiales. Este hallazgo ha puesto a prueba el conocimiento actual sobre las supernovas, que ocurren cuando una estrella envejecida colapsa y explota y que suelen ser el origen de las nebulosas.
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Las supernovas son uno de los fenómenos más violentos del universo. Cuando una estrella tiene más de ocho veces la masa de nuestro sol, al final de su vida entra en un proceso que culminará en una fuerte explosión.
Las estrellas fusionan átomos de hidrógeno en helio para su funcionamiento común. Si una estrella es lo suficientemente grande, empezará a producir elementos más pesados al envejecer hasta producir hierro.
Como las reacciones de fusión para obtener estos elementos exigen una gran cantidad de energía, la estrella colapsa rápidamente y finalmente explota en una supernova. Sus restos pasan a convertirse en nebulosas.
Una nebulosa con forma de fuegos artificiales
Generalmente, las nebulosas son irregulares nubes de gas y polvo. Por ello, un equipo de científicos de la Universidad de Dartmouth quedó impactado al descubrir los restos de una supernova compuestos por largos filamentos semejantes a los de los fuegos artificiales.
“He estudiado remanentes de supernovas por 30 años y nunca había visto algo así”, declaró a Nature el astrofísico Robert Fesen, quien lideró al equipo responsable de este hallazgo.
El descubrimiento fue presentado ante la Sociedad Astronómica Americana, junto con un artículo publicado en el repositorio ArXiv. En el artículo se lee lo siguiente:
Aquí presentamos imágenes ópticas profundas que revelan una nebulosa extraordinaria y altamente estructurada con docenas de filamentos largos alineados radialmente con un punto de convergencia cerca de una caliente estrella central
El objeto Pa30 llevaba tiempo siendo un misterio para los astrofísicos. En su centro se halló una estrella extremadamente caliente que parecía expulsar vientos solares a 16 mil kilómetros por segundo. Fesen explicó a Nature que esto era muy improbable, pues dicha velocidad equivale a un 5% de la velocidad de la luz.
Por sus características, los científicos ahora afirman que la extraña nebulosa Pa30 surgió de los remanentes de una supernova ocurrida en el año 1181 d.C. Esta fue observada por astrónomos chinos y japoneses durante seis meses hasta que se desvaneció.
Según los científicos, los extraños filamentos captados se deberían a “fotoionización de la eyección impulsada por el viento, debido a las interacciones agrupamiento-viento causadas por el viento de alta luminosidad de la estrella central”.